Más de 100 voluntarios respaldaron a atletas durante la carrera al cerro más alto de Costa Rica
Por: Alexandra Ivanova
Meses de esfuerzo y sacrificio, el trabajo común de los grupos organizados de la localidad y la participación de las entidades públicas y privadas, lo mismo que la colaboración voluntaria de más de 100 personas, todo esto estuvo detrás de organización de la XXXI edición de la Carrera a Cerro Chirripó.
Puestos de hidratación, asistencia y el recibimiento a los corredores, todas estas labores estaban realizando las personas que decidieron participar ad honorem en la organización de la XXXI edición de la Carrera al Cerro Chirripó.
Hoy en día, la competencia cuenta con la participación de 225 atletas; este cupo no puede ser superado, debido a las características de la ruta, ubicada dentro del territorio del Parque Nacional Chirripó.
La carrera recorre parte del Parque Nacional Chirripó, cubriendo de ida y vuelta un trayecto de 34 kilómetros, con un desplazamiento altitudinal que abarca de los 1350 msnm en la plaza de futbol de San Gerardo de Rivas, hasta los 3400 msnm en el albergue Base Crestones, ubicado en la zona de páramo en el Parque.
Mientras unos colaboradores estaban esperando a los y las atletas en el punto de salida en San Gerardo de Rivas, Pérez Zeledón, otros voluntarios les estaban brindando asistencia en los puestos de hidratación, ubicados en diferentes puntos del trayecto, hasta llegar a la Base Crestones.
Por su parte, en la Base Crestones, los corredores recibían hidratación y masaje para continuar la carrera.
Según dijo el presidente de la Comisión Organizadora de la carrera, Gustavo Arias, la más difícil ha sido la parte económica y logística, sobre todo, en la parte alta de la montaña.
“Las personas que lograron subir arriba, saben lo difícil que es tener el agua en este sector. Este año, la sequía ha sido muy fuerte y casi no había agua, por lo que hubo que subir el agua a caballo y esta fue la parte más difícil”, destacó el dirigente.
Según Arias, unas 60 personas de todo el equipo de colaboradores estuvieron en la montaña.
“Todos los colaboradores son voluntarios y es lo que hace posible el evento. Lo logramos, gracias al apoyo de tantas personas de San José, Cartago y todo Pérez Zeledón”, dijo el coordinador.
Por su parte, Luis Quesada, coordinador de la asistencia y cronometraje en la Base Crestones, dijo que, en la parte alta, los corredores reciben aguadulce, suero, agua, frutas y medicamentos.
“Somos 12 personas en la Base Crestones y el resto están en otros puestos. Subimos un día antes para preparar lo que necesitamos y estamos aquí para recibir a los corredores”, dijo Quesada.
Don Manuel “La Escoba” resguarda seguridad de atletas
Salir detrás del último corredor y acompañar a los atletas en todo el recorrido, para tener la posibilidad de avisar a los organizadores en el caso de una emergencia, esta es la función que realiza Manuel López Calvo, conocido como “La Escoba”, durante las competencias de Campo Traviesa, que se realizan en el cantón.
Durante la Carrera a Cerro Chirripó, don Manuel contó que su apodo se debe a la función que realiza en las competencias atléticas.
“Voy “barriendo” a las personas que quedan en el camino y no pueden continuar la competencia, por ello, me dicen “La Escoba”, explicó López.
El colaborador añadió que su participación no es competitiva, sino es para resguardar la seguridad de los atletas.
“Soy la persona que viene de último, cuidando el ambiente y al atleta, lo mismo que informando a los organizadores, como se va comportando la carrera y si algo pasa, informo a la organización”, destacó.
Don Manuel, también dijo que, normalmente, tiene que empezar el recorrido desde el punto de salida, pero durante la Carrera a Cerro Chirripó su trabajo se realiza de manera diferente pues sube a la Base Crestones un día antes de la carrera y luego, empieza a seguir a los atletas después de que el último corredor pase por el lugar.
“Esta carrera es muy difícil y tiene este punto de corte, donde los corredores reciben la asistencia. De aquí empiezo mi recorrido y voy con el último corredor. Pero normalmente, en todas las demás carreras salgo de último, para ir detrás del último corredor desde el lugar de la salida”, indicó el colaborador de la carrera.
López, dijo que realizó esta labor ya durante 110 carreras. Antes de empezar a realizar la función de “La Escoba”, don Manuel participó de varias competencias atléticas de manera competitiva, por lo que cuenta con mucha experiencia en el atletismo y conoce muy bien el ambiente de las carreras de Campo Traviesa.
“En mi vida he participado en muchas carreras, inclusive la de Cerro Chirripó y Cerro Paraguas. Tengo 25 años de practicar atletismo. Ya dejé de competir, pero me siento muy feliz, cuando puedo ayudar a los atletas y organizadores”, indicó López.
El colaborador, añadió que en varias ocasiones tuvo que ayudar a sacar las personas del trayecto de la carrera, si sufrían un accidente.
“Una vez durante la Carrera Cerro Paraguas, un corredor tuvo un accidente que le causó una lesión en la rodilla, por lo que tuvimos que llamar a la organización y lo logramos sacar de la montaña.
También en la Carrera a Cerro Chirripó, el año pasado, tuvimos que sacar a caballo a un corredor que se lesionó en el sector de Llano Bonito. Cuando entro con el último corredor, los organizadores ya saben que no hay nadie más en el trayecto, la carrera terminó”, dijo don Manuel.
Finalmente, López destacó que es colaborador voluntario y le gusta mucho ayudar durante las carreras que tienen como fin recaudar fondos para los proyectos de bien social.